La Selección de México cayó en el partido de ida de la Liga de las Naciones de Concacaf 2 – 0 ante Honduras y en el post partido, el entrenador Javier Aguirre fue agredido desde fuera del campo quedando con un corte profundo en su cabeza.
En el Estadio General Francisco Morazán de Honduras, México no hizo pie y se trajo una inesperada derrota por dos goles que le deja poco margen de maniobra si desea avanzar a las semifinales de la competición.
En general, el encuentro no se caracterizó por tener un gran despliegue futbolístico pero “La Tricolor”, cuando el partido seguía sin goles, tuvo las mejores oportunidades para convertir como un giro en el área de Jiménez o un tiro en el palo de Quiñonez.
El partido se tornó mucho más cuesta arriba cuando “Los Catrachos” se pusieron arriba en el marcador. Luis Palma que había ingresado a los 63′ solo tuvo que empujar el balón en su primera intervención para que se desate la algarabia local.
El propio Palma sobre los 83′ de juego amplió la ventaja a dos goles con un tiro raso, lejano y preciso que hizo estéril la maniobra de Ochoa. Con un 0 – 2 abajo, México deberá hacer un partido perfecto el próximo martes en el Estadio Nemesio Diez.
Sobre el final del partido, el entrenador Javier Aguirre recibió el impacto de una lata sobre su cabeza dejándole una herida de la cual brotó una considerable cantidad de sangre y por ello la Concacaf expresó una “condena enérgica” y adelantó que abrirá una investigación sobre el incidente.